LXIII

Practicando el no-actuar,
implementando el no-hacer
y gustando el no sabor,
todo se expresa en su bien.

Viendo toda la grandeza
que encierra la pequeñez,
la eternidad en lo breve
y en lo que apenas se ve
lo infinito, viviremos
como el santo sabe hacer.

Mediante pequeños actos
se erigen los templos que
abrazan el Universo
de la cabeza a los pies.

El santo jamás emprende
grandeza alguna, pues él
albergando en sí la propia
no la precisa emprender.

Quien todo lo encuentra fácil
siempre es justamente quien
lo hallará todo difícil
en cuanto tenga que hacer.

Lao Tsé